No todas las mezclas requieren el mismo tipo de movimiento, ni todas las hélices producen el mismo efecto. Según las propiedades del fluido y las condiciones de operación —como la viscosidad, el volumen o el grado de agitación necesario—, es fundamental elegir una hélice cuya geometría y orientación aseguren una transferencia de energía eficaz y un movimiento interno uniforme.
En TIMSA nos dedicamos al diseño, fabricación y comercialización de agitadores industriales, ofreciendo soluciones técnicas adaptadas a cada proceso. Sabemos que cada aplicación requiere un enfoque específico, por eso trabajamos con una amplia variedad de hélices para garantizar una agitación eficiente.
¿Qué son las hélices para agitadores industriales?
Las hélices son los elementos principales de los agitadores industriales encargados de generar el movimiento dentro de un fluido. Se acoplan al eje del agitador y están diseñadas para girar impulsadas por la energía del motor, lo que permite su acción directa sobre el medio a mezclar.
Existen múltiples configuraciones de hélices en función del tipo de fluido, el objetivo del proceso (mezcla, emulsión, suspensión, homogeneización) y las condiciones operativas (viscosidad, temperatura, velocidad de agitación). Su geometría —el número de palas, el ángulo de ataque, el diámetro, entre otras— está cuidadosamente calculada para optimizar el flujo y minimizar el consumo energético.
Función de las hélices en la agitación industrial
La función principal de las hélices en un sistema de agitación industrial es transferir la energía del motor al fluido para inducir un movimiento controlado. Este movimiento permite la mezcla homogénea de los componentes, asegurando la calidad del producto final y favoreciendo procesos como reacciones químicas, intercambios térmicos o la disolución de sólidos.
Según su diseño, las hélices pueden generar flujos axiales o radiales, lo que facilita la adaptación a distintas necesidades del proceso.
En definitiva, las hélices no solo activan el movimiento del fluido, sino que definen el tipo de agitación, la eficiencia del sistema y el rendimiento del proceso.
Tipos de hélices
Las hélices en los agitadores industriales se clasifican principalmente en función del tipo de flujo que generan: axial o radial. A continuación, se describen los modelos más utilizados en aplicaciones industriales:
Hélices de flujo axial
Las hélices de flujo axial impulsan el fluido en dirección paralela al eje del agitador, favoreciendo la circulación vertical y la mezcla en tanques de gran altura:
- Hélice marina: para procesos de homogeneización y dilución.
- Hélice T10: para homogeneización, dilución, disolución e intercambio térmico.
- Hélice T25: para homogeneización, dilución, disolución, mantenimiento en suspensión e intercambio térmico.
- Turbina axial: utilizada en procesos de homogeneización, dilución, disolución y emulsión.
- Turbina de doble flujo: indicada para homogeneización e intercambio térmico.
Hélices de flujo radial
Las hélices de flujo radial impulsan el fluido en dirección perpendicular al eje del agitador, generando un patrón de agitación lateral. Son especialmente adecuadas para aplicaciones donde se requiere un alto nivel de cizalladura o una dispersión eficaz en todo el volumen del tanque:
- Turbina radial: para dispersión e intercambio térmico.
- Disco dispersador: para dispersión y emulsión.
- Turbina Rushton: para dispersión líquido–líquido y dispersión gas–líquido.
- Rotor – estator: para procesos de emulsión.
- Áncora: para homogeneización e intercambio térmico.
- Rascador: para el barrido de fondo en el interior del tanque.
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